Poema
Todos los días tomaste mis manos
Tuviste mis abrazos cuando los necesitabas
Mis oídos te escucharon cuando algo te pasaba
Y mi boca te hablaba cuando hallaba sus palabras.
Pero no fue suficiente...
Yo te dí lo que tenía,
Y te seguiré dando,
Aún ahora que te has ido;
Seguirán mis manos, mis oídos y mis labios esperando... Otro dolor.
© 2012 Grecia Albornoz
Hermoso.
ResponderEliminar